El Contador Público como Consultor. Una radiografía de la organización.
El Contador Público como Consultor: Guiando a las Empresas al Gobierno Corporativo
C.P.C. Alejandro Valdez Mendoza
• Presidente del Consejo Directivo del Colegio de Contadores Públicos de Culiacán.
• Socio Director de Oficina Culiacán en RSM México.
La Consultoría es una actividad por medio de la cual se detecta un problema al interior de la empresa con la finalidad de encontrar una solución a éste.
El Contador Público puede hacer una radiografía de la organización y con base en sus habilidades de consultor, está orientado a empatizar y a ser sensible con las necesidades de la empresa, pues a diferencia de la labor del auditor, el consultor debe tener la mente abierta para “resolver” una problemática puntual y, en caso de que así se requiera, echar mano de profesionales especializados en los temas que se están evaluando y que deban ser atendidos.
Durante la última década, los servicios de Consultoría prestados por contadores públicos, se han vuelto cada vez más recurrentes y se han ido especializando. Esto obedece a que los servicios que tradicionalmente prestamos en nuestra actuación profesional como contabilidad, auditoría e impuestos, son conceptualizados como un cumplimiento, y la aportación de valor hacia los empresarios y directivos de alto nivel, es percibida generalmente baja.
Es por ello que, en nuestra renovación y reinvención como contadores públicos, hemos abierto el abanico de nuestra actuación profesional.
Cada vez es más común, ver a Colegas incursionando en la consultoría en diferentes áreas de especialización. Y precisamente dependiendo de la especialización que se tenga, la oferta de servicios se seguirá adaptando a los requerimientos del mercado y a la sofisticación de los modelos empresariales, que exigen una mayor profesionalización y una implementación vanguardista.
Algunos servicios de consultoría que podemos prestar, son:
- Gobierno Corporativo.
- Riesgos y Control Interno.
- Auditoría Interna.
- Cumplimiento y Ética.
- Mejora de Procesos.
- Asesoría Financiera.
- Gestión de Riesgos de Tecnologías de la Información.
- Entre muchos otros.
Y hablando específicamente del rol del contador público como consultor en la implementación o fortalecimiento del Gobierno Corporativo de una empresa, es importante resaltar que nuestra formación y enfoque, puede ayudar a las compañías a llegar gradualmente a adoptar prácticas de gobierno corporativo aceptables, adaptadas al tamaño y momento en el cual se encuentra una compañía; es decir, aún cuando existen códigos de principios y mejores prácticas de gobierno corporativo, no hay una regla de cocina para decidir cuáles prácticas debe adoptar una empresa en un momento determinado.
El gobierno corporativo es el sistema por el cual una empresa es dirigida y controlada. Es el marco dentro del cual interactúan de forma armonizada el consejo de administración, la administración, los accionistas y terceros interesados como clientes y acreedores, para garantizar que la empresa se administre en el mejor interés de todas las partes interesadas, y sea éste un generador de valor sostenible en el mediano y largo plazo.
Un buen gobierno corporativo es esencial para un negocio exitoso, independientemente del tamaño o giro del negocio, siendo aún más crítico en empresas familiares.
Ayuda a que las empresas funcionen de manera transparente y responsable, que los riesgos se gestionen de manera eficaz y que se puedan atraer y retener a los mejores talentos.
Algunos de los órganos clave de gobierno corporativo incluyen:
Asamblea de Accionistas: constituye el órgano supremo de la sociedad, es un órgano de decisión y control básico para la vida de la sociedad, así como para la protección de los derechos e intereses de todos los accionistas.
El Consejo de Administración: es responsable de establecer la estrategia de la empresa, supervisar la gestión y garantizar que la empresa se dirija de manera responsable y ética. Es el órgano en el cual la asamblea de accionistas delega a través de su mandato, los destinos del negocio.
Administración: la administración, dirección o gerencia, es responsable de implementar la estrategia dictada por el Consejo y ejecutar las operaciones diarias de la empresa.
Partes interesadas: son cualquier grupo o individuo que tiene un interés en la empresa, como empleados, clientes, proveedores y la comunidad local.
Un buen gobierno corporativo trata de crear una cultura de responsabilidad y transparencia dentro de la empresa, de garantizar que todas las partes interesadas tengan voz y que la empresa se gestione de manera que se beneficie a todos.
Algunas de las razones y beneficios para adoptar prácticas de gobierno corporativo, son:
Mayor valor para los accionistas: puede ayudar a aumentar el valor para los accionistas al garantizar que la empresa se administre de una manera que minimice el riesgo y maximice los rendimientos.
Eficiencia mejorada: puede ayudar a mejorar la eficiencia de la empresa al buscar que los recursos se utilicen de manera inteligente y que los procesos se simplifiquen.
Mitigación de riesgos: puede ayudar a reducir el riesgo, al promover que la empresa cuente con un marco sólido de gestión de riesgos.
Reputación mejorada: puede ayudar a mejorar la reputación de la empresa al demostrar que es una organización responsable y ética.
Ahora bien, es importante enfatizar, que el gobierno corporativo no se trata solamente de la implementación formal y profesional de órganos de gobierno, sino que incluye una serie de acciones e iniciativas que dan soporte a dichos órganos y, por ende, a la empresa.
Las acciones de gobierno corporativo permitirán fortalecer el control interno; implementar y formalizar su estrategia de negocio; generar un plan comercial; llevar a cabo auditorías internas y externas, así como profesionalizar la gestión del talento, entre otras iniciativas, mismas que ayudan al negocio a ser empresa, y le permiten detonar su valor y sostenibilidad a lo largo del tiempo.
Adicionalmente, un buen gobierno corporativo enfocado en mejores prácticas promueve la sostenibilidad, la cual no es un desafío fácil, pero es uno que debemos enfrentar. El futuro de nuestro planeta, nuestra economía y nuestra sociedad depende de ello.
Algunos ejemplos de cómo las empresas pueden promover la sostenibilidad a través del gobierno corporativo son:
Ser transparente: Rendir cuentas a sus partes interesadas, las empresas deben informar sobre su impacto ambiental y social para poder monitorearlo.
Reducir su impacto ambiental: Promover desde el Consejo de Administración el uso de tecnología para la eficiencia energética, la reducción de residuos y la conservación del agua.
Ser socialmente responsable: Promover salarios justos, ofrecer condiciones de trabajo seguras y retribuyendo a la comunidad.
El contador público en su faceta de consultor de gobierno corporativo, debe desarrollar un perfil con ciertas características adicionales al del contador tradicional, ya que se requiere de un sentido de análisis diferente, un entendimiento puntual de las circunstancias de la compañía, de sus objetivos y sus perspectivas de negocio, por ello se puede decir que se resumen en cuatro grandes talentos:
- Una alta capacidad para conocer y comprender las necesidades de la empresa.
- Una fuerte capacidad para procesar, digerir y plasmar la información de los accionistas para comunicarla de manera rápida y clara.
- Ser ordenado, sobre todo en las ideas planteadas por los dueños y diseñar en conjunto las reglas que se van a implementar.
- Tener mano izquierda para poder señalar cuando las acciones de la empresa se contraponen a las mejores prácticas.
Por lo que un contador público ejerciendo su función de consultor, debe desarrollar sus habilidades blandas, tales como:
- Empatía.
- Sensibilidad.
- Entendimiento.
- Saber escuchar.
- Capacidad de análisis para identificar los problemas.
- Capacidad para investigar.
- Mente abierta.
- Capacidad para dar soluciones con la ayuda de otros especialistas.