Ley de Prácticas Corruptas en el Extranjero
Ley de Prácticas Corruptas en el Extranjero
Pago de sobornos
Por: Shelley M. Hayes , Arturo del Castillo
El pago de sobornos se ha llegado a ver como una práctica común en nuestra sociedad. Lo vemos todos los días y de hecho hasta lo esperamos, a pesar de lo aberrante que resulta. Pagar sobornos no sólo es atentar contra la integridad de las instituciones de la sociedad, sino también un delito que puede tener serias consecuencias, incluyendo elevadas multas y juicios penales contra las compañías y los ejecutivos que participen en esas transacciones. Hoy la corrupción debe ser un tema vigilado y proscrito de las prácticas de toda compañía.
¿Por qué resulta ahora que los gobiernos se han puesto estrictos en el combate a la corrupción? La explicación es sencilla: los tratamientos ilegales afectan a todos los negocios. En muchos países, México incluido, existe una creciente preocupación de la Alta Dirección para prevenir y afrontar la corrupción y cualquier otra conducta ilegal o contraria a la ética. Empresas y gobiernos reconocen que la corrupción eleva los costos y riesgos en todo tipo de transacciones. La quiebra de grandes firmas, las multas millonarias que han enfrentado otras, y los innumerables casos de cancelación de fusiones y adquisiciones derivados del descubrimiento de conductas sospechosas, están alentando una crisis de confianza.
¿Qué tan grave es que un alto ejecutivo distribuya millones en sobornos para conseguir beneficios ilegales, inducir el voto de un legislador o la asignación de una licitación hecha a la medida? ¿Y qué tanto afecta a la economía las “mordidas” que aceptan policías o inspectores, o las que se necesitan para agilizar un permiso municipal?
Estas preguntas han estado en el aire por mucho tiempo, pero la crisis económica de los últimos años, así como la extensión de la globalización, han disparado una redefinición en las reglas del comercio y los negocios. Como una forma de proteger la integridad de las operaciones y evitar las prácticas deshonestas, varios países han endurecido las regulaciones locales e internacionales que prohíben y sancionan el soborno de funcionarios públicos.
La Foreign Corrupt Practices Act, (FCPA, por sus siglas en inglés, Ley de Prácticas Corruptas en el Extranjero), es una ley que prohíbe a toda compañía de Estados Unidos (EU) o registrada en la Securities and Exchange Commission (SEC), sin importar su origen, sus subsidiarias, así como a cualquiera de sus directivos o empleados, pagar sobornos a servidores públicos extranjeros. Además, la FCPA obliga a estas compañías a establecer controles internos y mantener el registro de sus libros contables de tal manera que reflejen de manera exacta todas las transacciones realizadas por la compañía.
En este sentido, la FCPA tiene dos partes: la sección contra los sobornos y la sección de los requerimientos de mantenimiento de registros y controles internos. Prohíbe ofrecer cualquier cosa de valor a un funcionario público extranjero con la intención de obtener, retener o conseguir una ventaja de negocios impropia en relación con una transacción de este tipo.
Una oferta, un plan o una promesa de pagar o dar algo de valor (incluso en el futuro) puede constituir una violación a esta ley. La FCPA penaliza también cualquier pago de soborno que realice una persona que actúe en nombre de o en beneficio de la empresa sujeta a la reglamentación de la FCPA. Por tanto, distribuidores, gestores, socios o cualquier otra parte relacionada con la empresa queda comprendida para efectos de esta ley.
Requerimientos
En esta sección, la FCPA exige que todas las compañías mantengan libros y registros que reflejen con exactitud todas las transacciones realizadas y que mantengan un sistema de controles contables internos. El requerimiento se hace extensivo a todos los documentos originales; esto incluye facturas, recibos y reportes de gastos y no únicamente los libros contables. Estas disposiciones están dirigidas a evitar que las compañías oculten los sobornos y para disuadir de las prácticas contables fraudulentas. El hecho de no mantener un sistema de controles internos o de falsificar los libros y los registros constituye un delito penal en virtud de la FCPA.
Conclusiones
Los sobornos no sólo alteran las condiciones del mercado y aumentan los precios, sino que crean condiciones para que en futuros negocios sea el funcionario desleal quien decida qué empresas serán beneficiadas y cuáles perjudicadas. Es por esto que algunos países han decidido tomar acciones concretas que castigan estas acciones, como EU con su Ley de Prácticas Corruptas en el Extranjero, la cual prohíbe a toda compañía de EU o registrada en la Securities and Exchange Commission, pagar sobornos a servidores públicos extranjeros.
Fuente: http://www.eluniversal.com.mx/finanzas/91093.html
Artículo completo en: http://www.kpmg.com/MX/es/Documents/Delineando/sobornos_i.pdf