Viernes casual ¿En que consiste?
El viernes casual
Autor:
Mariana
profesion.es
El viernes casual, es una costumbre norteamericana en expansión.
Básicamente, el viernes casual permite, una vez por semana, que los empleados abandonen algunas de las restricciones de vestimenta propias del ambiente laboral.
Más conocido entre los países anglosajones de América del Norte, el viernes casual (conocido como Casual Friday, Casual Day, Dress-down Friday y denominaciones similares) es una política corporativa que poco a poco se ha ido extendiendo a otras partes del mundo. Veamos de qué se trata.
¿En qué consiste el viernes casual?
En compañías que tienen un código estricto de saco y corbata para los hombres, y zapatos de tacón y faldas para las mujeres, el viernes casual es la oportunidad de ir a trabajar con zapatos deportivos y camisas de manga corta. En ciertas empresas, se organiza un día de vestimenta temática (donde los empleados van disfrazados de vaqueros, de los años 20, etc.). Algunas compañías incluso permiten jeans, remeras y zapatillas, pero en otros casos se requiere un atuendo de negocios algo más informal (saco y camisa, pero sin corbata, o bien pantalones de vestir y zapatos sin taco para las mujeres). El viernes casual se aplica tanto a los empleados de menor jerarquía como también a los gerentes.
Un poco de historia
Comenzó como una costumbre estadounidense en los últimos años de la década del 50, cuando se buscaba subir la moral de los empleados en el nuevo ambiente oficinista. En ese momento, sólo algunas compañías alentaban esta práctica y no era tan popular. Pero en los años 70, cuando la producción de ropas casuales en los Estados Unidos comenzó a popularizarse, hubo una campaña masiva por parte de los productores para hacer que el viernes casual se extendiera por las empresas. Desde entonces, el viernes casual se ha instaurado en varias compañías como una práctica semanal.
Hubo un auge del viernes casual cuando a fines de los 90 tuvieron su momento las compañías punto com, particularmente en el área de San Francisco. Estas empresas buscaban que sus empleados se sintieran relajados, permitiéndoles usar shorts y sandalias. Sin embargo, cuando explotó la burbuja de las punto com, muchas compañías volvieron a sus antiguos códigos de vestimenta.
¿Para qué sirve?
El propósito de esta costumbre es hacer sentir a los empleados más a gusto, y relajados para disfrutar del fin de semana que está por comenzar. Algunas empresas han dado una vuelta de tuerca a esta tradición y les “cobran” a los trabajadores una pequeña cifra por permitirles vestirse de manera casual. El dinero recaudado se destina a obras de caridad o bien a comprar los regalos de navidad para el personal de la empresa.
Fuente: www.profesion.es