Tratamiento “especial” a la obesidad
Tratamiento “especial” a la obesidad
Autor colaborador:
Juan José Salazar
Un día leí la siguiente frase de un economista estadounidense llamado Thomas Sowell que podría relacionarse un poco con la situación actual de nuestro país:
“Si has estado votando por políticos que prometen darte cosas a costa de alguien más, no tienes derecho a quejarte si te quitan tu dinero para dárselo a alguien más, incluso a ellos mismos”.
Lo anterior, va relacionado con la nueva Ley de Ingresos para el año 2014, en donde el Gobierno planea recaudar 4 billones 467,225 millones de pesos; 12,729 millones de pesos menos de lo que el Presidente de la República pidió en su iniciativa para el año siguiente.
Pareciera que en nuestro país los impuestos son cosa de risa; ya alguna vez el Presidente Antonio López de Santa Anna cobró un impuesto a las ventanas, nadie sabe lo que pasó por su cabeza al imponer dicho tributo.
Lo atractivo el día de hoy, es el nuevo gravamen del Impuesto Especial Sobre Producción y Servicios (IEPS) de 8 % en alimentos con alta densidad calórica, que contengan 275 kilocalorías o mayor por cada 100 gramos, entre estos productos se encuentran los dulces, botanas, chocolates, nieves, helados, bombones, galletas, productos de confitería, entre otros. Este nuevo impuesto se ha dado a conocer como el impuesto a la “comida chatarra”; habría que conocer si nuestros legisladores tienen una definición exacta de este concepto, porque si el pretexto de gravar estos productos es que son los culpables de la obesidad en nuestro país, tendrían que aplicar este impuesto a muchos otros productos de la dieta de los mexicanos; imaginen los tacos o las tortas con IEPS. Además del nuevo impuesto ya mencionado, se adiciona uno nuevo que ha causado mucha controversia; 1 peso por litro por las bebidas saborizadas, así como los polvos, jarabes, concentrados, esencias o extractos que contengan cualquier tipo de azucares añadidas. Toda acción debe tener un motivo, o al menos debe existir una explicación; en este caso el fin de los nuevos impuestos para “los gorditos” es combatir el grave problema nacional de obesidad.
Según datos de la Cámara de la Industria Alimenticia de Jalisco (CIAJ) cada mexicano consumimos en promedio 4.5 kilogramos de dulces al año; los que más consumen son los menores de 20 años, los cuales representan el 52 % de la población. El dato alarmante pero al mismo tiempo obvio, es que el 60 % de este grupo son niños, esta es la razón por la que la mayoría del mercado de las golosinas está dirigido a este grupo. También somos el primer lugar mundial en el consumo de refrescos. Los resultados de la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición (ENSANUT) 2012 reflejan que prevalece el sobrepeso y la obesidad en los adultos en 71.3 % algo así como 48.6 millones. Ocupamos el segundo lugar en la OCDE en índice de obesidad y solo nos supera Estados Unidos. Lo más triste es nuestro primer lugar en obesidad infantil.
Está claro que la obesidad es un problema de salud pública que difícilmente se resolverá con temas fiscales.
La experiencia con este tipo de impuestos no es positiva, tanto nacional como internacionalmente. Un ejemplo claro es el impuesto a las bebidas alcohólicas que alcanza hasta el 26.5 y 53 % de un producto según su graduación. El resultado es que no existe una reducción en el consumo. Países como Dinamarca y Hungría implementaron este tipo de impuestos; en 2011 fue derogado en Hungría y en 2012 Dinamarca eliminó el llamado “fat – tax” debido a su fracaso.
Se supone que lo recaudado en este tipo de impuestos es utilizado en tratamientos para las personas que los necesitan debido al exceso en estos productos; (alcohol, tabaco y ahora “comida chatarra”) la pregunta es si todos debemos de pagar estos tratamientos, realmente no lo creo.
El problema nacional de obesidad va más allá de implementar nuevos impuestos como medida de salvación, este problema pasa por un tema cultural, de malos hábitos alimenticios y falta de ejercicio.
No pretendamos que de la noche a la mañana los mexicanos seamos sanos y delgados mediante los impuestos.
En un mundo paralelo…
¿Será correcto que en nuestro país nos aumenten los impuestos y al mismo tiempo le perdonen una deuda de 500 millones de dólares a Cuba?
Soy Juan José Salazar y nos leemos en la próxima…
Twitter: @Juanjosesyp
Facebook: Juanjo Salazar
SI EN VERDAD LOS PARASITOS…DIGO EL CONGRESO MEXICANO PENSARA QUE CON ESTOS IMPUESTOS A TODOS ESTOS ALIMENTOS CHATARRA VA A COMBATIR LA OBESIDAD Y TODAS LAS ENFERMEDADES QUE ESTOS ACARREAN, HUBIERAN PENSADO EN OTRA COSA PARA QUITARLE EL DINERO A LA GENTE PARA ELLOS DARSE LA GRAN VIDA CON SUS JUGOSOS SUELDOS Y PRESTACIONES QUE OBTIENEN.
Comparto tu opinion, es absurdo.
Muy buen artículo abarca muchos aspectos de interés para distintas áreas, me llamo la atención en área médica y el punto que toca de que la obesidad es un problema de salud pública me parece totalmente real y preocupante y algo alarmante que el gobierno lo quiera usar de excusa para engordar sus arcas atacando la economía de nosotros los ciudadanos, excelente artículo amigo te leeré en la próxima
Excelente información :)
Muy interesante, sin duda es el mejor columnista de este sitio web :)
Muy bien argumentado