La Fiscalización Digital y el aumento de la recaudación fiscal.
La Fiscalización Digital 2018
Dr. Francisco Javier Ramírez Hernández.
Miembro de la Comisión Fiscal Regional del Noroeste del IMCP
Socio de Racell Contadores y Consultores, SC
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Para el año fiscal de 2018 no fueron aprobados nuevos impuestos; sin embargo el aumento de la recaudación fiscal que recibirá el Gobierno Federal publicado en la Ley de Ingresos de la Federación el pasado 15 de Noviembre de 2017 se estima que se va a obtener a través de una mayor fiscalización a los contribuyentes por los nuevos controles que la autoridad fiscal ha venido implementando.
La nueva emisión del Comprobante Fiscal Digital por Internet (CFDI) Versión 3.3. y que para su implementación ha generado altos costos a los empresarios tiene como objetivo el incrementar y hacer más eficiente la fiscalización
con motivos recaudatorios.
El propósito de la Contabilidad Electrónica y la nueva Versión 3.3. del CFDI y su Complemento de Pago ahora denominado Recibo Electrónico de Pago (REP) permitirá al SAT en el futuro eliminar el cálculo y la presentación de las declaraciones fiscales así como conocer la información de manera inmediata y en tiempo real los ingresos, inventarios y las deducciones fiscales, entre otros permitiéndole detectar de manera oportuna cualquier discrepancia en el cumplimiento del pago de los impuestos .
Uno de los principales objetivos del SAT será el de seguir atacando los esquemas indebidos como la venta de facturas de operaciones inexistentes por lo que seguirá combatiendo sobre todo de aquellos contribuyentes que no son localizados, los que vienen declarando en ceros así como los que simulan operaciones cuyos actos traerán como consecuencia en algunos casos una acción penal de tres a nueve años de prisión cuando el monto de los defraudado fuera mayor a $2’310,520.00.
Además, el SAT cuenta con mecanismos que les permitirán conocer con detalle a los contribuyentes que emiten facturas de operaciones inexistentes cuyas características en algunos casos no tienen activos o éstos son insuficientes para operar, a los que tienen cuentas bancarias por periodos cortos de tiempo, a las Sociedades activas por poco tiempo y además algunas que comparten su domicilio con otros prestadores de servicios.
En algunos casos la autoridad ha venido considerando que donde hay un planeación fiscal seguramente existe una defraudación fiscal; sin embargo esa apreciación es incorrecta ya que el implementar una debida planeación dentro del marco de nuestras Leyes Tributarias que permita optimizar el pago de los impuestos en beneficio de los contribuyentes siempre será un procedimiento ético y legal.
Por lo tanto, derivado de la intensa fiscalización cuyo costo es significativo su implementación a cargo de los contribuyentes, se hace necesario una verdadera reforma fiscal apoyando al sector empresarial que contemple ampliar la base de contribuyentes y facilite el cumplimiento de las obligaciones fiscales.
Es importante, señalar que las propuestas presentadas por el Sector Empresarial a la Cámara de Diputados para activar la economía éstas no fueron discutidas ni aprobadas tales como permitir la deducibilidad de las prestaciones de previsión social así como las prestaciones que por mandato de Ley Federal del Trabajo son obligatorias su pago por lo que nuevamente para este año de 2018 se seguirá limitando su deducibilidad a un 53% ó 47% en su caso. Tampoco fue discutida la disminución gradual de la tarifa del ISR para llegar al 25% de tasa efectiva así como la implementación de la deducción inmediata de inversiones para todos los sectores de la economía de nuestro país.
Por todo lo anterior, se requiere una verdadera reforma que modernice nuestro sistema tributario y ayude a los empresarios a ser más competitivos.
Muy buen análisis respecto a la nueva forma de llevar a cabo los procesos de fiscalización por parte del SAT ante las empresas, pero como bien lo comenta es necesario que se implemente bien una Reforma Fiscal que permita a los contribuyentes tener certeza jurídica, pues con la nueva disposición en la emisión del CFDI versión 3.3, el deja en claro que no ha hecho bien un estudio de todos los articulos y conceptos que se manejan en las empresas para facturar sus productos o servicios, dado que en el catálogo de CÓDIGOS AGRUPADORES, aún existen algunos conceptos que se quedan fuera, y en todo caso se tendrian que agrupar con el otros conceptos, lo cual traerá como consecuencia la información inprecisa para las empresa y del mismo SAT de no conocer los datos reales en sus inventarios principalment.