¿Quo Vadis? ¿Vas a abandonar?
Autor colaborador: CPC y MI Juan Gabriel Muñoz López
Amable lector:
Con motivo de las celebraciones espirituales de éstas fechas, me permití escribir el siguiente artículo esperando que sea de tu agrado.
¿Quo Vadis?
¿Haz escuchado este término y con mayor razón por éstas fechas?, pues bien, se trata de la pregunta que le hizo el apóstol Pedro a Nuestro Señor Jesucristo cuando éste se prestaba a regresar a Roma a ser crucificado por segunda vez al ver que Pedro huía de su encomienda recibida y trataba de abandonar la ciudad ante la matanza que el emperador Romano realizaba en esas épocas contra la naciente e incipiente religión Cristiana que derivo en lo que conocemos hoy como Católica.
Esta pregunta encierra un significado profundo que tiene que ver con el fiel compromiso hacia un objetivo planteado y/o fin encomendado, en la mayoría de los casos lo vinculamos al plano espiritual, pero también podemos enfocarlo a cada objetivo personal o profesional que nos empeñemos en conseguir.
Quo vadis en latín significa: ¿A donde vas Señor? y me he permitido darle un enfoque profesional a éstas palabras (con todo el debido respeto que se merece la sagrada palabra), pues en algunos momentos de la vida, cuando nos enfrentamos a problemas serios o un estrés laboral intenso, es muy común que queramos "abandonar" el propósito para el cual nos entrenamos o dedicamos todos los días, en lugar de salir adelante con trabajo y dedicación.
¿A donde vas Señor?… Es muy común escuchar resonar estas palabras en nuestro interior y más en los siguientes supuestos: Un conflicto laboral entre empleadores y empleados los cuáles no llegan a consensos y ven por el bien común, cuando en los matrimonios se tienen diferencias que se dejan "sanar" con el simple transcurso del tiempo, en lugar de un dialogo oportuno que fortalezca la unión familiar, una discusión estéril entre profesores y alumnos por establecer "posición" en la clase y pérdida de la relación de enseñanza- aprendizaje, en la elaboración de una reforma legal trascendental que es desechada por los intereses mezquinos de las fracciones partidistas de una nación, etcétera.
¿Quo Vadis? encierra el más alto compromiso de la persona misma, es un acto de Fe hacia nuestros valores más enconados como seres humanos, es una obligación moral ante la sociedad que deposita toda la confianza en las mentes más preparadas. Reconozco que en la mayoría de las ocasiones la adversidad o el desanimo hace "flaquear" al cuerpo, sin embargo, mente y corazón deben ser fuertes para sacar adelante el objetivo particular para el cual cada uno de nosotros es destinado.
En esos momentos de debilidad debemos recordar las palabras ¿Quo Vadis? y la grandeza del significado que ellas conllevan, procuremos analizar nuestras fortalezas, seguramente serán más grandes que nuestras áreas de oportunidad, el éxito no radica en caer sino en tener el valor y el firme propósito de levantase y seguir adelante, el trabajo diario con dedicación rinde sus frutos en un plazo determinado, si día a día nos capacitamos; podremos adquirir habilidades que nos sacaran a flote cuando el barco pretenda hundirse. Transmitamos el conocimiento a las nuevas generaciones, pues ellas harán grandes cosas en un futuro por nuestra nación, y sobre todas las cosas; llevemos un mensaje de amor y solidaridad para los menos favorecidos.
Recuerda: ¿Quo Vadis?
Un fuerte abrazo y lo mejor de la vida para tí y tus seres queridos.
Con especial mención y afecto para Alfonso Reyes mi colega en twitter.
Muy atentamente
CPC y MI Juan Gabriel Muñoz López
Consultor Fiscal