Evolución del trabajo del auditor con nuevas tecnologías



Evolución del trabajo del auditor con nuevas tecnologías

 

C.P. Hugo Ángel Vega Rivera

• Gerente de Auditoría y Finanzas – Rodríguez Soto y Asociados, S.C.

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A lo largo de los años hemos visto cómo los avances tecnológicos han revolucionado la forma de trabajar de los contadores; anteriormente se llevaban los libros diarios y libros auxiliares en libretas escritas a mano; posteriormente se comenzaron a utilizar máquinas de escribir que prometían una captura de datos un poco más ágil que llenar a mano hasta llegar a lo que hoy en día conocemos.

Es importante saber que el principio de la tecnología de hoy en día es eliminar procesos repetitivos, es decir, si ya se hacen registros contables en las pólizas contables, no debemos desgastarnos volviendo a hacer esos registros para emitir otros reportes.

Debemos recordar que las auditorías antes se basaban en la revisión manual y minuciosa de los registros contables, esto implicaba que se debían hacer técnicas de muestreo y verificación física de los documentos. Con el uso de tecnologías es posible que el auditor pueda realizar una revisión más amplia de la información contable con mayor rapidez y precisión.

Es importante recalcar que una ventaja que hay en el uso de las tecnologías es precisamente los adjetivos mencionados anteriormente, la rapidez y precisión, esto debido a que, tradicionalmente no se perciban algunas situaciones que sí puede percibir una computadora y sobre todo, para que un humano lo logre puede llevarle horas y a la computadora puede llevarle sólo unos minutos.

Sin embargo, la tecnología no se ha conformado con sólo analizar datos, recientemente se ha introducido otro gran avance tecnológico, la inteligencia artificial, la cual promete una auditoría más profunda, predictiva y automatizada. Sin embargo, esto no significa que una inteligencia artificial pueda realizar una auditoría, sólo la simplifica y el trabajo del auditor evoluciona a verificar que la información contable de los software pueda ser confiable y no manipulable.

Recordemos que una auditoría consiste en la evaluación de la información contable de una empresa para comprobar la veracidad aportada y determinar si refleja la imagen fiel de la empresa y que opera de manera transparente cumpliendo el marco contable y legal.

El auditor presenta un informe en el que emite una opinión referente al cumplimiento de las normas contables que aplique la empresa, en México por lo regular son las Normas de Información Financiera emitidas por el CINIF. Toda auditoría debe sujetarse a las Normas Internacionales de Auditoría emitidas por la Federación Internacional de Contadores (IFAC) a través de la Junta Internacional de Normas de Auditoría y Aseguramiento (IAASB); en dichas normas se marcan la pauta de lo que el auditor debe considerar para realizar su encargo.

El uso de nuevas tecnologías hace que el auditor pueda generar opiniones más eficaces y tener procesos más eficientes, puesto que la labor de estas máquinas está en describir y predecir las bases de datos; con esta información el auditor puede reducir riesgos y detectar fraudes; esto quiere decir que no sustituye el trabajo de un auditor, sino lo perfecciona.

¿Qué habilidades debe adquirir un auditor ante estos avances tecnológicos?

  1. Manejo de tecnologías para el análisis de datos. Hay algunos software en el mercado que permiten realizar pruebas sustantivas para una revisión de auditoría simplificando considerablemente las horas de ejecución del encargo. Es bien sabido que, las hojas de cálculo permiten desarrollar estas pruebas sustantivas que antes se hacían en papel; sin embargo, también es necesario explotar al máximo las hojas de cálculo con sus funciones para disminuir el riesgo de errores y tener más rápido la prueba realizada. El análisis de datos puede proporcionar a los clientes información valiosa que se puede utilizar para crear análisis altamente efectivos, lo que reduce ciertos procedimientos de auditoría sustantivos, al tiempo que se obtiene una mejor comprensión de las áreas claves de riesgo, lo que aumenta tanto la eficiecia de la auditoría. Esta tecnología podría ser la más madura de aquellas utilizadas actualmente por la mayoría de las empresas.
  2. Evaluación de sistemas informáticos. Una de las pruebas que como auditores debemos hacer es preguntar a la empresa cómo es su proceso de recepción, almacenamiento y embarque de mercancías; esta habilidad ingiere que se debe saber revisar el proceso de captura de datos en el software, la verificación de las copias de seguridad y detectar fallas o posibles manipulaciones de los datos en el software.
  3. Estimación de riesgos de seguridad cibernética. Lamentablemente la inseguridad no se ha quedado solo en delitos corporales sino también en delitos informáticos y cada vez hay más ciberataques a la información de las empresas, es por esto que los contadores auditores deben ser capaces de identificar riesgos cibernéticos y recomendar medidas para mitigarlos, si bien es cierto, se puede utilizar el uso de expertos en la materia, un desconocimiento del tema podría provocar una omisión de dicho uso de expertos. El trabajo del auditor no desaparece, evoluciona, ya que, si bien es cierto que los software son capaces de hacer procesar y simplificar información así como disminuir riesgos de errores en las empresas; el trabajo del auditor no sólo se basa en hacer pruebas, sino también en la revisión analítica de dichas pruebas y la evaluación de la aplicación de las Normas de Información Financiera. Sin embargo, sí es necesario aplicar las nuevas tecnologías para el desarrollo de las auditorías con el fin de tener una opinión más certera y disminuir las horas del encargo. 

Por cortesía de INCP:

Descargar Revista #106 Contaduría del Noroeste:


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